miércoles, 19 de junio de 2013

Sobre el Alma y psicoanalítica III

Aclarados los extremos de la definición de alma dentro de la filosofía de Nietzsche, paso ahora a ver como enfocan según Jung el psicoanálisis dos figuras distintas como Freud y Adler este segundo como tantos otros fue primero colaborador de Freud para después iniciar una andadura independiente.
Según Jung el alma humana tiene dos formas de comportamiento una es la descrita por Adler y que comprende lo que el mismo autor describe como instintos.
Es decir, el catálogo de movimientos, que nacen per se. Por ejemplo supervivencia e instinto de poder. Ya lo veremos más despacio.
Por su parte Freud, estudia el alma humana, la psique, desde el punto de vista de los objetos. Con esta oscura descripción, Freud simplifica todo el mundo físico o psíquico. Objeto es algo que mueve el al alma humana, tan objeto es el padre como lo es la madre. Como cualquier cosa material o inmaterial que represente un algo capaz de generar deseo o rechazo.
Se entiende que la posición freudiana es mas compleja. Por su parte los dos pretenden estudiar esos movimientos del alma en la neurosis. Es decir en la enfermedad literalmente enfermedad de la neura, (de la manía)
Para mi ese es el principal error de los dos sistemas, no se puede, no se debe, hacer un análisis funcional del alma circunscribiendo el estudio a las situaciones patológicas.
Si hay un instinto del alma este existirá en la persona normal y la enferma.
Si existe una conducta hacia al objeto madre, esta sera tan clara en el neurótico como en el individuo sano.
La tercera conclusión del psicoanálisis que se podría definir como la consecuencia somática, corporal, de un proceso mental.
Es algo que equivaldría a considerar el efecto como causa. Así un vehículo a motor que no quema bien y por tanto se apaga, equivaldría a decir que la conducta del bajo rendimiento y la suciedad del carburador es consecuencia de la marcha dificultosa. Cuando es evidente, que es al contrario, es la falta de una correcta mezcla de aire y combustible lo que crea el mal funcionamiento.
En resumen son causas somáticas las que producen conductas neuróticas y al contrario.
Y por ahora vale.

martes, 18 de junio de 2013

Alma y psicoanálisis II

Era ayer que hablaba de esa alma de Nietzsche. Un alma pura emanación animal, un alma que como Zaratustra dice morirá antes que el cuerpo.

El filósofo, habla aquí de esas facultades humanas; que pueden morir antes que el cuerpo. Por tanto habla de un estado de estupor o coma. Un estado vegetativo que es la consecuencia de esa muerte anímica.

Por su parte Jung, analizará las enfermedades de ese alma. El psiquiatra el psicólogo, son los terapeutas que tratan de esas patologías.

Una antigua raíz de la medicina, ya era consciente de esas disfunciones del yo. Freud descubrió o creyó descubrir, de la misma manera que los chamanes o los médicos brujos de las sociedades primitivas, esa relación del trastorno somático con el trastorno físico.

El descubrimiento de Freud se produce en su estancia (hoy la llamaríamos postgrado) El Hospital de la Pitié-Salpêtrière. Allí junto a el doctor Jean-Martin Charcot. Aprendió una ciencia médica tan antigua; que hunde sus raíces en la edad de piedra.

Siempre he mantenido, que fue una lástima que un prometedor histólogo se desviase de su vocación para ir a caer en el foco de creencias tan estúpidas como inverosímiles.

Lo cierto es que la medicina del alma y del mal de ojo, iba a sucumbir con toda facilidad ante la medicina de la farmacia. Donde la relación causa efecto esta determinada de forma científica y estable. Donde una cefalea comienza por combatirse con ácido acetilsalicílico.

La verdad es que hay que ser muy lerdo para no percibir que el éxito médico vendría de la mano de una farmacopea depurada y económicamente rentable.

Bueno hay que se muy tonto, o muy sagaz para postular un un médico brujo que tiene el poder sanador la taumaturgia, dentro de su cabeza. No hay laboratorio farma-químico. Nadie es capaz de competir con la medicina espiritual. Aunque lamentablemente para Freud y sus amigos, la elaboración de drogas, la producción de vacunas, y la cirugía basada en un exacto conocimiento de las disfunciones orgánicas, eran desde el punto de vista práctico y económico más seguras y rentables que todo el aparato psicoanalítico.

El alma en el psicoanálisis

Escribía esta mañana Lola Gracia algo sobre Carl Jung y el alma. Es difícil, explicar que es el alma para Jung. Por eso dejo un trozo de Así habló Zaratustra que es precisamente el que Jung comenta en su trabajo. Lo inconsciente en la vida psíquica.


Considero que es un tema muy denso, lejos de mis otras actividades poesía y reflexiones. Por ello haré una interpretación trozo por trozo, intentando no ser denso ni perderme en filosofías poco prácticas.

Dice Friedrich Nietzsche.

-El equilibrista había empezado con su número: había salido de una pequeña puerta y caminaba sobre la cuerda, la cual estaba tendida entre dos torres, colgando sobre el mercado y el pueblo...

Mas cuando se encontraba justo en la mitad de su camino, la pequeña puerta volvió a abrirse y un compañero de oficio vestido de muchos colores, igual que un bufón, saltó fuera y fue con pasos rápidos detrás del primero. ¡Avanza, cojitranco! gritó su terrible voz, avanza, perezoso, impostor, rostro pálido! ¡Que no te haga yo cosquillas con mi talón!

Zaratustra, sin embargo, permaneció inmóvil, y justo a su lado cayó el cuerpo, maltrecho y quebrantado, pero no muerto todavía. Al poco tiempo el destrozado recobró la consciencia y vio a Zaratustra arrodillarse junto a él. ¿Qué haces aquí? dijo por fin, desde hace mucho sabía yo que el diablo me echaría la zancadilla. Ahora me arrastra al infierno: ¿Quieres tú impedírselo?

Por mi honor, amigo, « respondió Zaratustra, » todo eso de lo que hablas no existe: no hay ni diablo ni infierno. Tu alma estará muerta aún más pronto que tu cuerpo...

Estamos hablando de una alma animal de un -Principio que da forma y organiza el dinamismo vegetativo, sensitivo e intelectual de la vida-. Lejos de cualquier cosa parecida a "sustancia espiritual e inmortal de los seres humanos"

Por tanto en Nietzsche, como en Jung o en las otras escuelas psicoanalíticas. El alma solo es lo que da forma y organiza el dinamismo sensitivo e... Como decía más arriba. Para usar un término que Jung no pudo usar es una especie de Software que maneja y relaciona el Hardware del cuerpo.

martes, 11 de junio de 2013

Posteos con Alberto Serra.

Bromeaba ayer con un post de Alberto Serra Agras sobre la reecarnación.

Estoy de acuerdo con lo que dice en su escrito.

Todas la personas que hablan de ello suelen presentarse con un aureola de grandeza. Sacerdotes de no se que, faraones egipcios, generales romanos...

Yo he terminado por sospechar que todos estas personas, padecen alguna patología aunque sea leve de su personalidad.

¿Pero cómo demostrarlo?

Aparte de esta manifestación espontanea, hay métodos en psicología que pretenden desenterrar de el olvido de el subconsciente recuerdos o situaciones molestas o dolorosas. Para ello son necesarias dos cosas, primero creer en la existencia del subconsciente cosa que a mi me cuesta creer. O bien admitir que nuestra memoria es capaz esconder recuerdos dolorosos o molestos, aunque los conserva. Es una cuestión de creer, otra vez la fe, que nuestro cerebro es capaz de ignorar cosas que guarda porque nos molestan.

El enunciado, no deja de tener cierto contrasentido. Implica la existencia de un desván, donde arrinconamos los trastos viejos... visto así no parece tener sentido.

Por otra parte, ahora ya sabemos, que la memoria no nos es fiel ni ante los buenos recuerdos. Las experiencias hechas con testigos de accidentes, sometidas al control judicial, han corroborado esta plasticidad del recuerdo. En el fondo nuestra memoria se parece a la de un Pc.

Los datos en ella mantenidos, lo son solo por un tiempo, solo cuando pasamos a disco duro los datos permanecen. La memoria sea física o virtual se limpia para recibir nuevos datos, es decir se sobrescribe. Sucesivas evocaciones, no se hacen sobre la memoria del hecho primario, sino sobre ese primer recuerdo.

Puestas las cosas así, el pretender evocar una memoria antigua supone poder reconstruir el mismo reto que el reconstruir un individuo a partir de los restos fósiles de una parte de sus huesos.

Pero aun hay mas, nacido un ser y fallecido, habría que encontrar un calco metafísico de su memoria, que sería accesible al alma personal en otra posterior reencarnación. En el símil informático, es el caso de un Pc que guadaría en una memoria central todos sus datos sus vivencias, de tal manera que si sustituimos este por otro Pc de igual arquitectura, podría acceder a la información que su antecesor había dejado en la nube o en la red para su uso.

Es evidente que en el estado actual de nuestros conocimientos de pisco-biología no sabemos que y como puede ejercer este servicio de nube, como se llama ahora.

Si es cierto que nuestra filosofía, con el topos uranos, el inconsciente colectivo, pueden invitarnos a pensar en una noosfera. Un mundo de una inteligencia común con sus leyes de interrelación específicas.

De momento es ciencia-ficción. Aunque si disponemos, de un método el científico para buscar la existencia de este continente virtual de memorias y experiencias.

Si un individuo se me acerca y me dice que fue sacerdote de Osiris, o en medio de una regresión himnótica, se dice general de Alejandro Magno por ejemplo, me bastará pedirle que escriba una oración del sacerdote en jeroglífico, o que ma haga un correcto discurso en griego clásico.

En fin, que demuestre conocer algo que la ciencia actual y nuestra identifique sin lugar a dudas con los conocimientos de la época y algo a lo que el sujeto solo pueda tener acceso por la memoria de sus vida pretérita.